Ya son 53 días los que ajusta hospitalizado el presidente del Once Caldas, Tulio Mario Castrillón Tobón en una clínica de Manizales. El infortunio inició cuando Castrillón, así como los otros miembros de la dirigencia del cuadro ‘albo’, se disponían a realizar una junta directiva, que tuvo que ser suspendida; al mismo tiempo que estaba prevista una reunión con Hubert Bodhert para empezar a analizar el futuro del ‘Blanco’. De inmediato fue internado y horas después le diagnosticaron una pancreatitis aguda, que en realidad ha sido para los médicos una verdadera labor titánica controlarla, al punto que Tulio Mario ha tenido que ser sedado e intubado permanentemente y su vida a estado en real peligro. El técnico del Once, Hubert Bodhert, no lo desampara y constantemente realiza visitas, unas más afortunadas que otras. Ahora, el panorama parece más alentador, pues el dirigente está consciente e inclusive puede direccionar diversas situaciones. “El presidente está bien, muy claro, trabajando y evolucionando. desde la cama ya ha hecho cositas y dando algunas indicaciones para desarrollar. Yo lo vi bien, está fuerte y puede tomar decisiones”, indicó Hubert Bodhert el viernes anterior. Bodhert comentó que en la dirigencia del Once Caldas ha habido gran respaldo al proyecto ante esta ausencia y aseguró que Jaime Pineda Gómez, máximo accionista del cuadro caldense, ha estado al frente y pendiente de diversos temas. “Toda la gente ha estado respaldando al presidente, tratando de sostener lo que él ha cosechado; la parte directiva ha permanecido ahí, metiendo el hombro mientras su ausencia y ahora que ya está claro y puede manifestar cosas, se ha venido desarrollando los pensamientos y las ideas que se han cuadrado con él”, complementó el entrenador. En Casa Blanca le deseamos pronta recuperación a Tulio Mario Castrillón en este difícil momento…
