La práctica matinal del Once Caldas, contó con dos espectadores de lujo para quienes recordamos aquella Libertadores del 2004: Diego Arango y Javier Araujo, los cuales estuvieron observando el trabajo realizado por el DT Hernán Lisi y sus asistentes en la mañana de este martes, en un entrenamiento que tuvo además algunas restricciones a la prensa por parte del cuerpo técnico.
Pero lo que parecía ser un día más en el diario vivir del ‘blanco-blanco’, dejó un hecho que por más anecdótico que parezca, no deja de ser llamativo. En un momento donde el plantel se disponía a realizar trabajo de pelota quieta, el ex campeón de Libertadores, Diego Arango, se acercó a tocar un balón cerca de la lateral del campo, generando que el asistente técnico Wilfrido Bazán le indicara en voz alta que se tenía que retirar de esa zona, pues no podía estar ahí: «Oiga retírese, sálgase de la cancha”, exclamó
El ex jugador del Once algo confundido y visiblemente ofuscado le dijo que cuál era la razón para sacarlo y dejó escuchar algunas frases como: “¡Respetá hombre¡”, “¿Quién me va a sacar?”, y lo retó de alguna manera diciéndole: “sácame pues”.
De manera airada el miembro del cuerpo técnico continuó discutiendo con Arango en un hecho que afortunadamente no pasó a mayores, pero que sin duda marcó el entrenamiento del hoy.
En palabras a Casa Blanca de quien fuera volante de recuperación del equipo de aquel 2004, dejó ver su decepción por cómo había sido tratado en la práctica y además se refirió a la situación actual del equipo:
“Es un momento triste, una situación que como jugador mientras estuve en el Once Caldas jamás viví, se ven buenos jugadores, pero pienso que hay una idea de juego a la cual no se han acoplado bien”
Y tuvo tiempo para comparar un poco la historia que vivió:
“…Actualmente no se ve un equipo ofensivo, de respeto; cuando los rivales venían al Palogrande era muy difícil que nos ganaran, éramos uno de los grandes…”, concluyó