Foto: Santiago Álvarez
Este sábado iniciará la fecha 4 de la Liga Águila y el Once Caldas tendrá que ir a la frontera a enfrentar al Cúcuta Deportivo de Pablo Garabello, con el fin de ratificar el buen pasaje que vive en lo futbolístico y demostrar una vez más la confianza que han ganado los jugadores.
No obstante, al equipo lo han atacado las lesiones; de entrada no cuenta con sus dos laterales derechos, Lewis Ochoa y David Gómez, aunque este último ya se recuperó, está trabajando en el aspecto físico, pero apenas sería una opción la semana entrante ante Alianza Petrolera.
El miércoles antes del partido ante América por Copa Águila, Carlos Lizarazo fue dado de baja de la concentración, debido a un absceso sufrido al lado de su tibia derecha. El caleño fue sometido a una pequeña cirugía para tratar de eliminar la infección y ese proceso tardará por lo menos dos semanas, así que el jugador se perderá mínimo los dos partidos siguientes en Liga y el juego de vuelta de Copa ante el Escarlata.
Javier Reina salió al minuto 42′ del enfrentamiento de mitad de semana por un tirón en su músculo posterior. El diagnóstico inicial es de contractura y de entrada quedó descartado para el viaje a Cúcuta.
La otra novedad, es que Marcelino Carreazo tiene a su pareja a punto de dar a luz; ha vivido momentos de estrés y desde luego preocupación, por lo que el cuerpo técnico ha optado por dejarlo en la ciudad este fin de semana, a pesar que fue jugador importante ante el América de Cali.
En ese orden de ideas son 5 bajas para este compromiso en un equipo que tiene nómina corta y donde el cuerpo técnico tendrá que arreglárselas con lo qué hay para sumar en la difícil Cúcuta.
