Iniciando 2015 y con la responsabilidad de jugar la primera fase de Copa Libertadores contra el poderoso Corinthians de Brasil, existía la sensación en Manizales que el Once Caldas no se había armado con los suficientes refuerzos para hacer un papel destacado en el torneo internacional.

Efectivamente la presentación en el primer encuentro fue paupérrima y el equipo albo cayó goleado y eliminado sin jugar el partido de vuelta. Ese semestre se tuvo un papel discreto.

Para 2016 y después de la buena temporada que tuvieron los dirigidos por Torrente, la escuadra caldense tenía la necesidad de rearmarse para seguir figurando, siendo protagonista del torneo local. Infortunadamente abandonaron el equipo jugadores vitales y el recambio no llegó, los elementos que llegaban a nuestra ciudad no eran competitivos, ya que venían de otras ligas donde no tuvieron oportunidades o continuidad de juego. Otros, empezaron a arribar en el transcurso de la temporada y por ende les costó tomar ritmo de competencia.

Sumando todos estos elementos solo podía esperarse una consecuencia y era un discreto año, donde no se logró obtener una idea de juego y tampoco consolidar una nómina que obtuviera los resultados necesarios. Adicional a todo lo anterior, el Once terminó con un déficit en su nómina porque existían posiciones donde ni siquiera habían jugadores que se desempeñaran naturalmente en la misma.

Pero para quien les escribe, este año han ocurrido hechos que nos hacen creer un poco más en que se pueda hacer una buena temporada. Y lo afirmo por el hecho que la conformación del plantel profesional, sin creer que es una de las mejores nóminas del país, por lo menos está siendo armada haciendo un análisis de las reales necesidades que ostentaba el equipo en cuanto a las posiciones, la mayoría de contrataciones tuvieron regularidad de juego el año pasado y están haciendo la pretemporada completa. Esos hechos, para mi gusto, son fundamentales para hacer un verdadero plan de trabajo y desmostrar que se viene aprendiendo de los errores del pasado.

Sobre el nivel deportivo y todo lo que pueda demostrar el Once Caldas este año tendremos que esperar algunas semanas para hacer evaluaciones y tener una idea que nos permita ilusionarnos o creer que las malas presentaciones continuarán, pero de entrada, las cosas interesantes de este Once Caldas 2017 generan una expectativa que se había diluido desde hace algunas temporadas.

Por Juan David Morales

Columnista Casa Blanca OC

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