Por sanciones políticas de Estados Unidos a la República Islámica, las firmas internacionales de indumentaria deportiva, Nike y Adidas, retiraron su respaldo al combinado iraní para este campeonato del mundo. Los jugadores no solo se han visto obligados a comprarse sus propias camisetas, sino que además Nike les ha vetado el uso de sus botas. La prohibición de está última marca llegó 2 semanas antes, por lo que generó la indignación de dirigencia, cuerpo técnico y jugadores de Irán, alegando “falta de respeto” y que mezclar deporte con política es “un crimen para el fútbol”.  “Los jugadores se acostumbran a sus uniformes y no se les puede pedir que las cambien con tan poco tiempo antes de un evento de esta importancia. Algunos han tenido que comprar zapatillas nuevas o pedirlas prestadas a otros jugadores de sus equipos en Europa”, dijo Carlos Queiroz, entrenador de Irán.  “Adidas no diseñó las camisetas de la selección iraní. El combinado participa en el Mundial con las camisetas lisas de esa empresa”, declaró Hedayatolah Mombeini, directivo de la federación iraní Los asiáticos vencieron a Marruecos en el debut con un autogol al final del partido y, el lunes 25 de junio, tendrán su segunda salida ante Portugal en Saransk.