Por segunda ocasión en el semestre, el Once Caldas le dio una alegría a su gente en el estadio Palogrande, obteniendo 3 puntos que si bien llegan demasiado tarde pensando en el torneo, suman para esa temida tabla del descenso y dejan una buena sensación en el hincha acostumbrado a salir triste del estadio Palogrande.
En cancha, se presentó un partido de los que agrada al público y preocupa a los técnicos, con muchas llegadas y poca contención en el medio campo de ambos equipos; ante esta situación, Michael Ortega fue determinante y brilló en la zona ofensiva del Once Caldas, que frente a la ausencia de un goleador acudió a su volante creativo, quien logró el primer doblete de su carrera deportiva y llegó a 4 goles en el torneo.
El primero de ellos llegó al minuto 14’ luego de eludir a un rival y definir de pierna zurda al palo derecho del arquero uruguayo Nicolás Vikonis. A los 16’, el ex Once Caldas Henry Rojas cogió desacomodado a los volantes y empató el juego cuando los hinchas aún celebraban. Por fortuna, el local no bajó los brazos y 10 minutos después, nuevamente Ortega convirtió, anticipando de buena manera al defensa y definiendo de cabeza a pesar de su baja estatura.
En la continuidad del juego, ambos equipos generaron opciones que respondieron de buena manera ambos porteros; como es costumbre, José Fernando Cuadrado fue determinante. Sobre el final del compromiso se presentó una acción polémica donde Miguel Nazarit realizó una entrada deslizante en el área sobre Machado, que los visitantes reclamaron como pena máxima, pero el juez no lo determinó así.
De esta manera, Herney Duque y Juan Carlos Henao debutaron con triunfo en Manizales, con un equipo que demostró una actitud diferente pero con jugadores que aún están en deuda, sobre todo en la zona de ataque.
